El antiguo hospital de Río Blanco, ubicado en Veracruz, es un lugar envuelto en misterio y leyendas. Construido a principios del siglo XX para atender a los trabajadores textiles de la región, el hospital cerró sus puertas hace décadas, dejando tras de sí un edificio en ruinas que hoy es famoso por las historias de apariciones y sucesos paranormales.
Quienes han visitado el sitio aseguran haber escuchado lamentos, pasos y susurros en los pasillos vacíos. Algunos incluso afirman haber visto sombras moverse entre las ventanas rotas o sentir cambios bruscos de temperatura sin explicación lógica. Estos relatos han alimentado la creencia de que el hospital está habitado por espíritus de pacientes que murieron en el lugar.
A pesar de los testimonios, no hay evidencia científica que confirme la existencia de fenómenos sobrenaturales en el hospital. Muchos de los sonidos y sensaciones que experimentan los visitantes podrían explicarse por la acústica del edificio en ruinas, el viento o simplemente la sugestión de quienes llegan con la expectativa de vivir una experiencia paranormal.
Más allá de si está embrujado o no, el hospital abandonado de Río Blanco sigue siendo un sitio que despierta curiosidad y temor en quienes se atreven a explorarlo. Su historia, marcada por el dolor y la lucha obrera, lo convierte en un lugar lleno de energía y significado, donde la realidad y la leyenda se entrelazan en cada rincón.
