Equinoccio en Chichén Itzá: Magia, cultura y tradición

Chichén Itzá, en la península de Yucatán, es el lugar más popular de México para celebrar el equinoccio de primavera, por lo que miles de visitantes se reúnen para presenciar los fenómenos de la luz natural y el movimiento de las sombras que causan el efecto de la serpiente emplumada que baja por el templo que rendía culto a Kukulcán. La creación de los mayas muestra una serpiente de 120 pies de longitud que baja arrastrándose hasta unirse a una enorme cabeza de serpiente al final de la escalera.
El equinoccio marca el inicio de la primavera y el final del invierno. Como cada año, podrá presenciarse el próximo 21 de marzo del 2025; la mejor hora para ver este espectáculo en Chichén Itzá es entre las 12:00 y 14:00 horas. Miles de visitantes de todas partes del mundo acuden a presenciar la maravilla diseñada por los mayas, además de que muchos asisten para recibir los primeros rayos de sol de la primavera, y así cargarse de energía positiva.

Al momento que empieza moverse el sol, en las escalinatas de la pirámide aparecen triángulos de luz que simulan la forma de una serpiente y conforme pasan los minutos, la luz va descendiendo poco a poco hasta llegar a la cabeza de serpiente en la base de la pirámide, lo que crea una asombrosa ilusión óptica. Esto es una muestra dramática de la astronomía maya, de su impresionante arquitectura y de sus increíbles conocimientos de geometría. La gente construyó la pirámide para medir la época del año, y cuándo las horas del día y las horas de la noche eran iguales en el año 1500 a.C. El equinoccio era muy importante para las civilizaciones mayas, ya que marcaba el comienzo de la temporada de siembra.

CELEBRACIÓN Y RITUAL
Cada año, miles de personas se reúnen en Chichén Itzá para presenciar este evento único. Los visitantes llegan temprano en la mañana para asegurar un lugar desde donde puedan observar la sombra descendiendo por la pirámide mientras el sol asciende en el horizonte. Durante el día, se llevan a cabo ceremonias y rituales mayas para dar la bienvenida a la llegada de la primavera y honrar a los antiguos dioses.

EXPLORACIÓN
Además del equinoccio de primavera, Chichén Itzá ofrece una riqueza de maravillas arqueológicas para explorar. Desde la imponente pirámide de Kukulcán hasta el Templo de los Guerreros y el Observatorio, hay mucho que ver y descubrir en este sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

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HISTORIA
Chichén Itzá fue una gran ciudad construida por los mayas y prosperó aproximadamente entre el 600 y el 1200 d.C. La ubicación fue elegida por su gran cenote o pozo, que también es la razón por la que recibió su nombre. Chichén Itzá se traduce como “Boca del Pozo”. Se convirtió en una de las ciudades mayas más grandes gracias a su sistema de agua y su red de carreteras construidas para mejorar el comercio.
A medida que las civilizaciones mayas del sur de México se deterioraron, la población de Chichén Itzá creció. No fue hasta la llegada de los conquistadores españoles que los habitantes abandonaron la maravillosa metrópolis para buscar refugio en la selva en forma de pequeños pueblos.
En 1988, Chichén Itzá fue declarada Patrimonio de la Humanidad y el 7 de julio de 2007 se agregó a la lista de Las Nuevas Siete Maravillas del Mundo Moderno.