El primer hallazgo se reportó el pasado fin de semana en Macayal, y unos días después, la misma escena se repitió en La Merced. Los pescadores de la región recolectaron cientos de mojarras tilapia, colocándolas en la orilla, ya que la mayoría flotaba sin vida en el agua. Se sospecha que la causa de la mortandad sea el consumo de barbasco, un veneno natural para los peces, aunque esto aún debe ser confirmado por las
A pesar de los esfuerzos de los pescadores para recolectar toneladas de pescado en los últimos días, miles de peces muertos aún permanecen en la laguna. Esta situación preocupa a los habitantes, quienes temen que la venta de estos peces muertos pueda comenzar a circular en Hidalgotitlán y municipios cercanos. La comunidad pide precaución en la compra y consumo de pescado, ante el posible contagio.
Este no es un caso aislado. El lunes 1 de julio, se encontraron cientos de peces muertos en la Laguna del Ostión, en la zona turística de Las Barrillas, perteneciente a Coatzacoalcos. Las causas de esa mortalidad aún son desconocidas. Los peces muertos, principalmente sardinas, se observaban tanto en el agua como en la orilla, de diferentes tamaños.
