El Gobierno de México, a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), expresó su rechazo a la iniciativa de ley SB4 aprobada por el Congreso de Texas, calificándola como una medida antiinmigrante que busca criminalizar a las personas migrantes y resultará en la separación de familias, discriminación y perfilamiento racial.
México reconoció el derecho soberano de cualquier país para decidir sus políticas públicas, pero expresó su rechazo a cualquier medida que permita a autoridades estatales o locales detener y retornar a personas nacionales o extranjeras a territorio mexicano.
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La Cancillería mexicana manifestó su preocupación por las medidas legislativas que afectarán los derechos humanos de más de 10 millones de personas de origen mexicano que residen en Texas, generando ambientes hostiles propensos a actos o crímenes de odio.
Asimismo, reiteró su rechazo a cualquier medida que contemple el retorno involuntario de personas migrantes sin respeto al debido proceso.
Se instruyó a las 11 representaciones consulares en Texas a aumentar sus encuentros con autoridades aliadas, legisladores y agrupaciones de derechos civiles para reforzar la presencia en el estado.
La iniciativa de ley SB4 es rechazada por México ante su aprobación en Texas
Además, se llevarán a cabo jornadas informativas, asesorías legales y migratorias gratuitas, y se explorarán apoyos legales estratégicos para salvaguardar los derechos humanos de la población afectada.
Esta respuesta del Gobierno de México refleja su compromiso de proteger los derechos de sus nacionales en Estados Unidos y su posición en contra de medidas que impacten negativamente a las comunidades migrantes.
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